¿De verdad quieres un carro?
A lo largo y ancho de nuestras vidas, se nos ha vendido la idea que el éxito personal es tener tu carrito, tu casita, tu familia y tu perro. Idea proveniente sobre todo del sueño americano que durante tanto tiempo ha prevalecido en occidente y fuera de este. En este texto no voy a tomar como sujeto principal el sueño americano, sino uno de sus pilares sobre el que se sostiene; el carro.
Exceptuando si vives en Amsterdam, Berlín, Oslo, Utrecht o muchas de las ciudades europeas, vas a concordar en que tu ciudad esta construida principalmente para moverte en carro, pero… ¿esto siempre ha sido así? En realidad, no y es que cuando avanza la infraestructura automovilista casi en todos los casos retrocede en torno al transporte público, ciclovías, banquetas, etc. Esto no es ninguna casualidad y viene de la mano con que las empresas automovilísticas hagan lobby para impedir regulaciones. Por poner un ejemplo, en Alemania como lo menciono la Deutsche Welle en su documental “Acelerar sin limites en las autopistas alemanas” el partido CDU (Unión Demócrata Cristiana) rechazo totalmente las regulaciones de velocidad en las autopistas alemanas (Autobahn) y fue debido a que ciertas empresas automotrices alemanas hicieron lobby para que sucediera así.
Como vemos, no solamente en Alemania, sino que en toto el mundo las empresas automotrices hacen lobby (corrupción) para evitar que haya limitaciones hacía los carros. De esta misma forma en que se impiden ciertas regulaciones, avanzan la infraestructura diseñada especialmente para los carros como lo son puentes peatonales (anti peatonales), más carriles en las calles, puentes para los carros, etc.
No es ningún secreto que intentar caminar, andar en bici, patineta y/o usar el transporte publico sea un martirio para quienes tienen el atrevimiento de usarlo. Esto es consecuencia de que la infraestructura en nuestras ciudades no esta diseñada para que la habitemos de esa forma, sino que para que vayas en tu carro. Para quienes tienen el valor de utilizar otros medios de transporte ajenos al carro, son los mas vulnerables de sufrir accidentes y que según el limite de velocidad de la calle por donde se camine, ande en bici o se patine, el accidente puede ser hasta mortal. Esta mortalidad no es propia para los peatones o ciclistas, México es el séptimo lugar a nivel mundial en tener más accidentes mortales hacía los automovilistas. Pues al moverte en carro pones en riesgo tu vida al igual que la de los demás.
Vemos además que el moverte en carro es ineficiente por donde se vea y que los gobiernos apuesten grandes cantidades de dinero publico hacia este tipo de infraestructura limita e imposibilita que ese mismo dinero se vaya hacia un transporte publico integro, barato y de calidad, hacia ciclovías, etc. Nos damos cuenta de que el moverte en transporte público, bici y/o caminando es difícil, impráctico, tardado y hasta mortal por consecuencia de que le apostemos al transporte privado. El creer en que el carro es eficiente es totalmente un mito, pues vemos que en las ciudades donde hay un transporte publico de calidad y eficiente es más rápido llegar a tu destino de esta forma a utilizar el auto.
Al construir ciudades diseñas para los carros y no para las personas, da como resultado ciudades llenas de tráfico, con accidentes diarios y algunas veces mortales, llenas de contaminación auditiva, pero sobre todo de CO2, ya que los carros aportan un 18% al cambio climático, ¡casi 1/5 parte!
Entonces… ¿Por qué nos seguimos moviendo principalmente en carro? Como ya lo comenté, es debido a que durante las últimas décadas los gobiernos apoyados por las empresas automotrices han estado destinando la construcción de nuestras ciudades para los carros. Aunque no es la única razón. Como lo dije en el inicio el carro es un símbolo de estatus, privilegio y según el sueño americano; un símbolo de progreso individual. Es muy importante conectar los carros con el resto de la forma en que vivimos, pues nada es aislado. No hay que ser un genio y darse cuenta en que vivimos en un sistema capitalista el cual prioriza la ganancia sobre todo lo demás y hablando de transporte; los carros son los que más producen ganancias frente las otras formas de transporte.
Al vivir en un sistema capitalista lo que se prioriza sobre todas las cosas es al individuo y se rechaza lo colectivo, popular y público. Es por esta razón que se le mira con desprecio y clasismo al transporte publico y con ojos alienados se observa al carro como un símbolo supremo individualista. Para eso solo tenemos que salir a la calle y ver cuantos carros solo va el piloto, rara vez hay más pasajeros. En cambio, al ir en transporte publico lo compartes con otras personas, al salir en bici una de las cosas más bellas es salir acompañado y sentir el viento sobre tu rostro a la vez que hablas en voz alta para que tu amigx te escuche o aquellas largas caminatas donde hay risas y se platican las cosas más profundas y no te das cuenta y ya caminaste diez kilómetros. Esa es la belleza de las otras formas de transporte y en realidas son pocos los automovilistas que las conocen y al no estar consciente de otras formas de movilidad se van a lo conocido, “seguro” y “cómodo”.
El transportarse de otras maneras ajenas al carro hoy en día es revolucionario y rebelde frente a estas ciudades construidas para los carros, pero sobre todo y en el fondo; construidas para el capitalismo. El imaginar y tomar acción para embellecer nuestras ciudades con metros, trenes, ciclovías y banquetas es la manera en que podemos combatir esta gran problemática. Recordemos pues que a final de cuentas que somos animales sociales y que nos gusta está en compañía de otras personas. Así que hagamos ciudades más humanas. Te invito a que pruebes si aún no has probado el salirte en bici con amigxs, el tener aquella platica de horas mientras caminas, el utilizar el transporte público, pero sobre todo te invito a soñar y hacer ese sueño posible.
